Inmersión en fondos de arena dorada con peñascos volcánicos
El origen volcánico de las Islas Canarias favorece que el buceo en sus aguas tenga de fondo paisajes rocosos de formas insólitas. Este es el caso de Bajón del Río, una baja de arena dorada a 18 metros de profundidad de la que asoman peñascos volcánicos de varios metros de alto y forma aparasolada. Estas ‘setas’ son un refugio de biodiversidad singular. Este punto situado al norte de la isla de Fuerteventura, en medio del estrecho que la separa del pequeño islote de Lobos, se encuentra a solo cinco minutos de navegación desde el puerto de Corralejo.
Bucear en una explosión de vida marina cerca de Corralejo
Esta es una inmersión asequible a buceadores de todos los niveles, pero solo con las condiciones adecuadas de corriente y marea. Al descender, la enorme explosión de vida marina alrededor de estas enormes ‘setas’ sorprende. En sus techos hay una ingente cantidad de esponjas. Patrullando el lugar vemos bancos iridiscentes de hasta seis especies distintas, como seifías y sargos. Meros, abades y jureles nadan buscando pequeñas presas, mientras las viejas ramonean sin parar. Y en la arena se puede ver algún chucho escurridizo.